«no respondes. adonde eres tu que no me fablas. por la ventura bolaste a·las celestiales moradas. ahora quisiessen los dioses que dexando el pesado cuerpo bolasse adonde tu eres: o mi buen señor plega te ahora dexar hun poco la compañia de los soberanos dioses e descender a visitar esta sierua tuya. esta sola sea la paga de mi infinito e leal querer e señalados seruicios. Mas mesquina de mi »