«muy diligente sieruo del dios de·los metales a Busiris deduxo. E conseio·le que matasse los peregrinos que por su tierra passassen e lluego lloueria. Busiris con amigables oydos oydo el conseio: respondio cumplire tu dicho e en ti primero lo comensare que en los otros. E sacrifico el cruel tirano Atarcio adiuino: e los cielos lloraron louiendo la muerte suya. E como de allj el tirano la maluada costumbre »