«la soberana lealtad de·los magnificos quatro braços del reyno: que nunca ni tan leales vasallos Dios fallo en·la cristiandad: ni los reyes del mundo en·la tierra: como fueron son y siempre seran los constantes aragoneses: que no solo algunos: mas todos a·la postre a·la muerte se offrecieron por su dios y por su fe a·lo menos en Çaragoça: y por su rey tan en todo el reyno:»