«misericordioso Dios le prometiera quando dadas las peliceas tunicas los embio fuera de·la tranquilidat e vida gozosa. E amblando Adam a Set enseño·le la carrera. diziendo. Fallaras mis pisadas. las quales la verda yerua no pueden padescer quemadas e esculpidas en la madre nuestra: los peccados e miserias de mi: padre tuyo: han causado esta plaga. Sigue fijo mio tu viaie de aqui d·este valle: do yo primero »