«fasta su enemiga por la verdad y la virtud: y dexare de defender yo al cauallero tan christiano y tan como criado y tan amigo nuestro? No lo padeçe mi sangre real. Aperçebid por·ende mis caualleros las armas: aperçebid las manos que no entiendo de falleçer para el dia. Assi como lo dixo assi lo puso por obra: que digo assi? Mejor y mas presto fue con el Çyd que no lo dixiera»