«Ysopo. Los arrendadores como supieron esta vendicion afincadamente demandaron quien hauia seydo el vendedor e conprador: mas el philosopho e el mercader concordaron amos a dos en vno que dixessen que poco auia costado: dixo Ysopo a·los arrendadores: este es el conprador e aquel es el vendedor: e si amos lo niegan yo soy libre: e por tal me affirmo: e por este donayre cabiloso sorriendo se los arrendadores del tributo dexaron el»