«e se pusiessen a sus pies rogaron le que le preguntasse quien le hauia muerto. E el entonçe respuso: Esso no preguntare yo: ca abasta me que el sin culpa sea librado e no pertenece a mi que el culpante se descubra.§ Otro semejante milagro se dezia d·el. Vna moça fija de vno que staua en vna ciudad cerca por encantamientos de malas artes parecia a todos que era yegua. »