«d·ellos fincadas las rodillas invoco al señor e salvador nuestro e fizo parar e star quedos todos aquellos que con el ydolo fazian diabolicas cerimonias a no poder se mouer a algun lugar. E assi se stouieron todo el dia quemados de las grandes caluras no supiendo de donde les houiesse acahecido el estar fincados en vn lugar sin mouer se. Entonçe los sacerdotes d·ellos dixieron que staua en·»