«dulces rios e las orillas en·derredor de vnas yerbas tiernas e bien olientes guarnecidas. E llegando començo de cojer e comer e beuer de la fuente: e affirmaua jamas en su vida cosa de tanta dulçor e suauidad hauer beuido. E fallo en el mismo lugar vna cueua dentro de·la qual algun tanto reposo. E quando hauia menester de sustentar el cuerpo la gracia de Dios mediante ninguna cosa de »