«En fin rogando le mucho nosotros que oyessemos d·el alguna palabra para reparo nuestro a penas podimos recabar que vn poco de mansedumbre nos fablasse. Este como a·las vezes vna fiera marina llamada ippotamo destruyesse la region comarcana e vezina: rogado por los labradores vino al lugar e como houo llegado a ella dixo le: Yo te mando en nombre de Jesuchristo que no destruyas dende adelante esta tierra. »