«en celada. E despues mando a·los hombres de cauallo de·los numidas, que caualgassen fasta el val d·aquel a escomouer la crueldat de Sempronio, a·los quales hauia mandado que a·la primera salida de·los nuestros se retrayessen, por los passos sabidos. El consol enuadiendo aquestos locamente, e siguiendo los, yelo·se la hueste dayuna al passar el rio, en·el sobras grande frio, a·los quales trebaiados»