«que tenia reposada. E entro por·el palenque desemparado de combatedores.§ Hanibal endreçada su batalla en Cannas mando seyscientos hombres a cauallo de·los numjdas, que se passassen a·los enemigos, qui por mostrar su fidelidat, liuroron sus escudos e sus espadas a·los nuestros. E fueron recebidos a·la reeguarda. E assi como la batalla se començo a mesclar, estrenyentes los punyales que tenjan escondidos, tomaron los escudos de·los»