«nosotros al santo obispo de aquella fallamos hauer ende mil virgenes e mil monges cuyo amor que mostraron e honra que nos fizieron dezir os ni basta lengua ni lo sufre la verguença de como nos rasgauan los mantos arrebatando nos e porfiando cadaqual en leuar nos consigo. Vimos assi mismo ende muchos de aquellos santos religiosos que tenian diuersas gracias de Dios: los vnos seruian en predicar otros en abstinencia »