«pusieron los espanyoles ligeros, e sobras abtos a los furtos de·las guerras, e vn poco mas adentro los escudados, depues bien luenye los hombres a cauallo, por razon qu·el struendo de aquellos no reuelasse lo que haujan cogitado. E mando los todos estar quedos, fasta ora de tercia. Cerca d·esto, como los pompeanos seguros e cargados de yerua tornassen, e aquellos qui eran quedados en·las tiendas, reposados,»