«mi Dios e perdonar te ha tus pecados.§ E como lo houo oydo sin tardar fincadas las rodillas suplicaua je·lo. Entonçe boluiendo se a·la gente que le siguiera fizo los todos yr en paz. E aquellos partidos el quedo se con·el santo hombre sperando d·el la promesa. Entonçe Apollonio tomo le e yendo con el al monesterio ensenyaua le deuer mudar la orden del viuir e con »