«de·los romanos, començada la batalla contra los veientos, como los albanos desemparada la hueste de·los romanos, fuissen en algunos oteros cerca, e aquesto turbasse los coraçones de·los nuestros, crido claramente que los albanos haujan fecho aquesto de su mandamjento, por razon que entorneassen los enemigos, la qual cosa acarreo terror a·los veientos, e ardiment a·los nuestros. E assi restituyo por su conseio el fecho medio perdido.§»