«hay que piense hauer dexado el mundo e las obras del diablo: no basta en esto hauer renunciado que haya dexado sus heredades e campos e los otros negocios. sino que renuncie haun a los propios vicios e eche de si los desprouechados e vanos deleytes: ca estas cosas son de·las que el Apostol dize: Los desseos vanos e danyosos echan al hombre a perder.§ Pues esto es verdaderamente renunciar »