«otras el yazia quedo e haun las oreias no bolvia a ellos ni les cosa alguna respondia. E como ellos muchas vezes las cosas mesmas e otras peores le tornassen a dezir e el no se mouiesse yrados los demonios viendo que menospreziaua las palabras d·ellos emprendieron de le açotar. E de muchos tormentos dexaron le medio muerto. Empero ni haun por quanto le fizieron lo pudieron mouer de donde »