«vezes venian ladrones a el e le furtauan el pan de que solo comia: e si tenia algo otro para su mesurado comer. E como le muchas vezes enoiassen: vn dia fue se al yermo e tornando dende mando a dos grandes dragones que le acompañassen e que stouiessen a·la puerta de su monesterio: e guardassen·la entrada. E viniendo los ladrones como acostumbrauan veen las guardas que stauan »