«solia. Los gallos presumjentes de victoria, assi como la sobredicha, andantes adelante començaron a enchir los fossados de·las tiendas e a baxar la tierra de·la caua. En la qual cosa ocupados, Cesar echando subitamente la cauallerja de todas partes, taio los en pieças.§ Titurjo Sabino, contra la grande e ancha hueste de los gallos, retenjendo los caualleros dentro las defensiones, engendro en·ellos sospecha que los temiesse, e por creer»