«a·los seruidores suyos fueron pequeñas viandas. e non grandes njn muchas. ansi como bien paresçe en·los sus hermitaños e santos profetas. Ca a sant Pablo el primero hermitaño a·la ora de su yantar le enbiaua medio pan con·el cueruo, e aquella razion le doblo quando vino a el sant Anton. Ca estonçe le enbio el pan entero para amos a·dos. E avn Elias en·el desierto»