«a Dios si son prouechosas que las de. Pues que cosa es lo que daña, o aprouecha sabe·lo el fisico e non el enfermo. e lo que nuestro señor vee ser demandado contra la saluaçion non lo oyendo, o non lo otorgando ansi se demuestra ser saluador. ca bien conosçio el fisico si lo que demanda el enfermo es para la su salud. E por ende non da a voluntad»