«escapar. E ansi como somos costreñidos en cosas dubdosas. prouechosamente en pecados pequeños caemos porque en los grandes sin desesperaçion non pequemos. E ansi veemos de aquesta perplexidat es suelto. esto es el onbre del angustia es escapado quando de·los pecados pequeños a las muy grandes virtudes da vn salto. Onde dize Raymundus en·la su Suma. çiertamente acatada la verdat, la perplexidat, o angustia non ha lugar. E non»