«tal enfermedat librados. E por aquesto son piadosamente de tractar e deuen tales atribulados de aver consolaçion por que de Dios pueden aver curaçion. Onde grandes varones e muy perfectos padesçieron aquesta enfermedat de·la conçiençia erronea escrupulosa, que es temer pecado onde non ay pecado. e fueron curados por la mjsericordia de Dios.§ Libro quatorzeno.§ Sigue·sse el libro quartodeçimo que contiene remedios e consolaçiones contra las turbaçiones e tristezas»