«de·las palabras.§ Escusa quanto pudieres el rojdo de·los hombres. Ca mucho empeece el trato de·los negocios seculares: haun que se fagan con pura intencion. Ca luego somos ensuziados: e encatiuados de·las vanidades yo quisiera muchas vezes hauer callado: e no hauer stado entre los hombres. Mas por que fallamos tan de buena voluntad: e platicamos los vnos con los otros como nos acahezca que atarde sin daño»