«la deuota oracion: que no con el delicado maniar. Entonce mas te alegraras de hauer guardado el silencio: que de hauer mucho fablado. Mas valdran entonces las sanctas obras: que muchas palabras fermosas. Entonce mas plazera la vida strecha. e la grande penitencia que todo el deleyte del mundo. Aprende agora suffrir en lo poco: por que puedas ser entonce de·las cosas mas graues librado. Prueua aqui primero lo que»