«consolaciones. empero si Jesu se escondiesse: e los dexasse vn poco: luego se quexarian: o se desesperarian. Mas los que aman a Jesu por el mismo Jesu: e no por su propia consolacion: assi le bendizen en la tribulacion: e angustia del coraçon: como en la consolacion. E puesto que nunqua los quisiesse dar alguna consolacion: siempre lo alabarian. e siempre le querrian dar gracias. O quanto puede el amor puro»