«de aquesta vida para que no me embuelua mucho en las necessidades del cuerpo. por que por el deleyte no sea tomado de todos los empachos de·la alma. e por que yo de trabaios quebrantado no sea derribado e lançado: no digo de·las cosas: que la vanidad mundana con toda affeccion dessea. mas de aquestas miserias: que penalmente agrauian la alma de tu sieruo con la comun maldicion de·»