«tu quebranto, nj sera njnguno que te consolara en tan grand tribulaçion. nin fallaras qujen ponga melezina, a·tu amargura. Yo consolar te he sy pudiere llorando contigo planto muy amargo.§ Esto sobre dicho pone Origenes en vna su contemplaçion. Estonçes la bien aventurada virgen quando non fallo njngund reparo dixo.§ O que amarga consolaçion, añadiendo dolor sobre dolor. E entonçes boluio·se contra su fijo, e con grande amargura, e»