«su fijo començo de comer vn poquito, e apenas lo podia tragar. E santa Maria Magdalena lloraua muy mucho, e los disçipulos. E Jhesuchristo fazia·les señal que no llorasen porque non lo viese e sintiesse su madre. E acabado de comer era ya grand noche. E dixo Jhesuchristo a·la muger. Señora madre mia yd vos con estas mugeres para vuestra casa que ya es mucho tarde. Ca mañana me»