«dize y bien Hostiense. No pierde este priuilegio por venir a Roma. Ca ende no se distingue de donde sea: mas si dexa de ser obispo: renunciando al lugar e a·la dignidad. Empero si renuncia el lugar: e no la dignidad: no lo pierde. E la razon (la qual algunos aprueuan) porque el confessor escogido por el obispo: no lo puede absoluer de·la excomunion: es porque no tiene poder»