«el mundo de·lo que no agrada: y si no podeys tener verdadero amor a·lo·menos cauteloso lo mostrat por no dar la temerosa muerte ad aquella que ya la veo: y por paga de ser en vuestra busca tan largo camino venida no querays asi tan desfauorecida sin sperança enuiar la: y pues ella a tantos trabaios por solo ver·os se dispuso: y vos el sallir los muros de vuestra ciudad le encareceys:»