«no que asaz enteras ellas no fuessen: y en ser del cielo venidas: mas por el mismo Dios y nuestro Señor dadas: de mas alto precio y mas diuino quilate que todas las otras armas reales: ca ni las mismas de Francia fueron por Dios: mas por angeles dadas: mas ahun por la parte diestra que estaua la cruz: que es la parte mas noble: por ser la parte del coraçon:»