«a desdezir se delante de aquellos: que lo oyeron. Empero si el prelado al subdito: el padre al fijo: el marido a·la mujer: el maestro al discipulo, o el señor al esclauo: dize palabras injuriosas castigando los: no es obligado a pedir les perdon: segun sant Agostin en la regla. en·donde dize fablando de·los prelados. Si conosceys vosotros hauer sobresallido no os demandan que pidays perdon a·los»