«nuestros desseos. medio, fin, y principio de nuestra salud y consuelo. Con su recuerdo qualquier otra passion se nos haze liuiana, qualquier trabajo nos pareçe descanso, qualquier dolor tenemos por alegria, y en fin qualquier pobreza nos es complido contentamiento. A quien pues mas dignamente se puede y deue endreçar el thesoro y recuerdo de aqueste tan diuino y esclarescido misterio, muy altos y muy poderosos principes señores y reyes, saluo»