«tal pensamiento mis entrañas se rebueluen y tiemblan, hasta render el spiritu. Con todo me queda siempre señor la sperança del reparo de tu misericordia jnfinita: de·la qual leho que esta llena la tierra. jnuocar la he pues señor: y no cessare de cantar la eternamente para siempre jamas. Y con tal seguridad prostrado agora ante ti, señor piadoso, en·el suelo: con arrepentido coraçon y muy doloroso: confiesso hauer»