«principio de todo pecado. Por·ende Crisostomo: assi como todos los otros pecados derriban al infierno, mayormente la soberbia: assi las otras virtudes suben al cielo, mayormente la humildad. Desseen pues los cobdiciosos y los soberbios el reynar y triumphar en·la tierra: pues que los voluntarios pobres de spiritu, y que se reputan por tales, esperan de reynar en·los cielos. ca no hay cosa que pueda ni deua dessear»