«recibiendo grandes affruentos de muy spantables animales que me perseguian: y quando algunos hallaua con piadosas vozes llamaua el nombre de Pamphilo: el qual yo no dudo que no me huyesse: mas por creçer mas mis males su callar era repuesta: y depues que ya todo el boscaje tuue cercado y tal hombre hallar no podia asi como muerto me dexe caher en tierra: y por sallir de pena en la busqua de aquell infinitos remedios»