«pregonero de·la madre santa yglesia, del qual ahun que indigno: oye Dios por su boca, lo que a·la salud cumple de·las sanctas ouejas. Por aqueste scelerado consejo de aqueste pontifice, confirmaron los inuidiosos judios: el enuejecido proposito que tenian de matar su rey y nuestro maestro. O maluado consejo: o reprouados capitanes de pueblo: o consejeros llenos de malicia y blasfemia: que ceguedad es la vuestra tan ciega?»