«del dulçor de tu amor tan sobrado, en lugar de gotas de sangre, suen mis ojos lagrimas de amargoso dolor y repentimiento: pues con·el padre y con·el Spiritu sancto viues y reynas para siempre jamas, y sin fin.§ El segundo articulo de·la sagrada passion es quando nuestro redemptor y maestro sudo gotas de sangre: en·el qual hay tres cosas muy notables y dignas de ser recordadas con»