«precioso rostro: la qual cosa çufrir de personas tan dejectas: se estima por muy graue y penosa. Terceramente fue offendido y maltractado de personas de stado: los quales siendo estimadas en·el pueblo por muy venerables santas y religiosas: no cabe en·ellas sospecha de sin justicia. e assi la passion y pena de nuestro maestro Jesu consideradas aquestas circunstancias, fue sin ninguna comparacion cruel y muy aspera. O ingratissimo scelerado»