«poder llorar su dolor, les respondio. Quien tal esperaua de oyr, o fijos y amigos, nunca deuiera ser madre: ni tiene razon de biuir: la que tantas razones tiene de morir. O fijo mio alegre descanso de mi vejez. O mi dios y señor. pues assi tenias ordenada tu muerte: por·que por piedad no disponias que no la viera tu madre? por·que diste mayor lugar a·la malicia para»