«las almas. como lo hallamos escripto por el bienauenturado sant Mathias. y quantoquiere alguna vez podamos ser leuados al mal de·la pena: no deuemos consentir de ser leuados al mal de·la culpa. Como permitio el mesmo Jesu en·la temptacion del desierto, de ser leuado por el diablo arriba en el monte: mas no consintio de·le deuer adorar. y assi podemos nosotros ser leuados a·los lugares peligrosos»