«no se examina la virtud y bondad, sino en casa de Annas: conuiene saber en·la auctoridad y consentimiento de·la peruersa consciencia de·los que tienen encomendado el consejo: porque despues salga dende la execucion mortal de·las obras damnadas, por los que tienen el lugar de Cayphas. por lo qual muchas vezes por justos merescimientos sentimos muy irada la mano diuina. No desmamparando por tanto nosotros el sagrado euangelio:»