«sin que lo que se quita, se restituya primero. pues tuyo fue lo que la madre sancta yglesia nos pregona por sin remedio, que no se dexa el pecado, si no se buelue a su dueño lo que le fue primero tomado. No presuma nadi pues, o señores y hermanos de quitar la fama a su proximo: sabiendo con Augustino, que no se tiene Dios por seruido por otro reparo, sino»