«tanto para el dia de·la resurreccion sacratissima, se quita en·la yglesia el sobredicho velo, o cortina: la qual antes nos defendia como a pecadores de no ver el rostro del altar y del sanctuario. Comoquier que algunas vezes no es inconueniente de velar nuestros rostros, por no ser vistos de·los hombres: y esto para euitar vanagloria, quando hazemos algunas obras sanctas y virtuosas. O en otra manera contraria,»