«menosprecio vestir·le vestidura real la qual segun el costumbre de·los reyes antigos, era vestidura de purpura, con·la qual por augmento de confusion burlando·le, le saludauan por rey. Bien conuenia por cierto vestidura vermeja para cuerpo tan rubricado de tan infinitas heridas: porque se cumpliesse aquello que d·el escriuio Esayas, quando segun la glosa: los angeles marauillando se que el precioso cuerpo del glorioso Jesu, el qual»