«trabajos? A·los quales se podria dignamente dezir lo que reza el Psalmista: fijos de·los hombres para que amays tanto la vanidad? pues sabemos que nuestros peccados armas son del diablo, con·las quales arma su rauia contra el humano gentio: las quales le desarmo con su sagrada passion nuestro redemptor y maestro Jhesu. E por·ende assi como acostumbran los vencedores en·el triumpho lleuar ante si las armas»