«fijo de Dios eterno, como pudo tu lengua rauiosa formar palabras tan espantosas? como pudo tu pensamiento concebir crueza tan disfamada? Si tu consciencia te·lo figuro por hijo de Dios, por que razon le sentenciaste por miedo de cesar? O malauenturado de ti que confiaste en·el principe y en·el fijo del hombre: en·el qual como sabias no hauia sperança de bien ni salud. Quien podria, o alma»