«y herederos de Dios. Mas dezi me, o luxuriosos y inuidos: o soberbios y auarientos: o golosos iracundos, y perezosos: que pro sentires vosotros en·el peso graue de·la redempcion de·la cruz? Que pro sentiran en·ello los religiosos dissolutos y curiales y los otros eclesiasticos que las cosas diuinas como mercaduria cotidiana tienen venales? Por cierto, o muy poquito, o ninguno: pues arays con buey y con asno:»